“He solicitado en tres ocasiones la apertura del expediente Minerve, amparado por el secreto de defensa. Tuve tres negativas. La tercera vez fui invitado a almorzar por el almirante Orsini, entonces jefe de las fuerzas estratégicas de submarinos. Fui recibido por una multitud de oficiales superiores y almirantes diciéndome en esencia: "no trates de averiguar: no hay nada que saber, el archivo está vacío". Mi reacción, natural, fue decir: "si el expediente está vacío, no debería ser una gran violación de la defensa secreta mostrarlo...". La respuesta siempre fue: "No, no mostraremos, pero está vacío". Me costó mucho seguir la lógica. Incluso años después. Hoy, espero que algún día se abra este archivo. Porque realmente quiero saber la verdad algún día. Y tengo la sensación de que la Marina la conoce. »

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"Después de la elección de Nicolas Sarkozy, hice una nueva solicitud y luego recibí una carta del jefe del gabinete privado del presidente invitándome a contactar al comandante de los archivos de la Armada de Vincennes, que había sido notificado de mi solicitud. y la aceptación del presidente. Así que contacté a este comandante, un capitán, e hicimos una cita. El día señalado, me estaba esperando, habiendo reunido todos los archivos en una habitación (si no recuerdo mal, 5 cajas grandes). Pude consultarlos libremente. El comandante me había dicho, en la introducción, que después de mi carta había examinado los archivos y respondió a la presidencia que no había nada, en los documentos archivados, que justifique un secreto de defensa tan largo. En realidad no vi nada especial. Creo que fue a finales de 2007. Creo que estos son los mismos archivos que ahora están abiertos a todos. »

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